La receta de hoy es para el reto
de cocina de Instagram en el que más me gusta participar, Food Fiction
Division. Un reto de 12 meses de películas y series lleno de toques culinarios.
En esta ocasión la serie elegida por nuestra partner es Foodie Love. Una serie
de Isabel Coixet que trata la historia de una pareja que se conoce a través de
una app de comida. A mí la serie, la verdad, poca gracia me hizo (supongo que
tenía las expectativas demasiado altas), pero la temática del reto es, ¿con qué
plato conquistarías a un foodie? Y yo no os traigo una receta con la cual yo
conquistaría el estómago de un foodie, sino que esta es una de las recetas con
las que mi chico conquistó mi tripita. Y es que, aunque tiene poco tiempo y le
cuesta ponerse, en el fondo es un cocinillas (y sino, preparad esta receta suya
y me decís).
Ingredientes:
·
2 muslos de pollo
deshuesados o 2 pechugas de pollo en trozos pequeños
·
2 cucharadas de aceite de
cacahuete ( se puede sustituir por aceite de sésamo o de girasol)
·
3 dientes de ajo cortados
en láminas finas
·
50 gr de jengibre fresco
pelado y cortado muy finito
·
1 o 2 guindillas frescas
sin semillas y cortadas finas
·
2 cucharadas de salsa de
pescado
·
2 cucharaditas de azúcar
moreno
·
Pimienta negra recién
molida
·
1 manojito pequeño de
cilantro fresco picado
Preparación
Calentamos una sartén grande y
ponemos el aceite.
Salteamos el ajo, el jengibre y
la guindilla hasta que se doren bien.
Agregamos el pollo y cocinamos un
par de minutos. Incorporamos la salsa de pescado y el azúcar y salteamos 4 o 5
minutos.
Ponemos un poco de pimienta y
añadimos un poco de cilantro. Salteamos bien y servimos caliente.
Podemos acompañarlo con un poco
de arroz jazmín si nos apetece o ya si lo preferís podéis acompañarlo con unas
patatas salteadas al estilo coreano (receta AQUÍ), es una mezcla brutal.
Que
aproveche!!! Besosssss
Gema
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